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jueves, enero 3

Ellas no se cuidan


Desde hace tiempo me he fijado en algo muy curioso entre las actrices y las modelos. Resulta que “casualmente”, y lo pongo entre comillas porque soy muy fan de las comillas, ninguna, absolutamente ninguna, hace dieta. ¿Casualidad? No lo creo. Cuando se les pregunta algo tan obvio como ‘Y entonces, cuéntanos, ¿tú cómo te cuidas?’, lo más lógico sería ‘sólo me alimento a base de rábanos y zanahorias’. Pues no. Ellas lo “único” (fan nº 1 de las comillas) que hacen es: beber mucha (solo) agua, comer alimentos sanos, mucha fruta, mucha verdura, comida baja en sal, comida ecológica,  evitar los donuts, las napolitanas, las madalenas y todo aquello que si no engorda mata, hacer deporte todos los días, de vez en cuando descansar de tanta “grasa” sobreviviendo a base de yogures, y encima la mitad son vegetarianas. ‘Pero no estoy obsesionada con mi dieta, sólo me cuido’. ¡Y una mierda! ¡Y una mierda señoras! ¿Cómo es posible que en tan poco tiempo hayamos pasado de admirar a la curvilínea de Marilyn, a adorar a esos palos de escoba con ropa que desfilan por las pasarelas mundiales? Pero lo que más me preocupa de todo esto es, qué pensarán sus abuelas. ¿Qué abuela dejaría que su nieta comiera de esa manera? Un drama. Porque, qué queréis que os diga, donde esté un buen caldo con pelotas en Navidad, un puchero en Primavera, unas lentejas en Verano, y un gazpacho en Otoño (mi abuela ha perdido la noción de las estaciones y de la temperatura anual), que se quite todo lo demás. Volviendo al tema, que ya empiezo a desviar la atención de las modelos a mi abuela, sólo puedo decir que hay que estar contenta con lo que tiene una. Porque eso es lo que nos hace únicas. No quiero dar un discurso de High School Musical ahora mismo, pero hay que empezar a mentalizarse que lo que tienes, lo tienes, y por algo lo tienes. Hay que cuidarse, pero tanto física como psicológicamente. Y para eso hay que quererse y estar segura de ti misma. Citando a Dios sabe quién “Lo primero de todo, es verte tú bien”. Y eso es así. ¡Por eso os digo que os saquéis partido y que no desistáis! Y sobre todo os digo, que seáis vosotras mismas, no alguien que no sois. Hacedlo por vuestras abuelas al menos, digo. 




M.