El primer paso para superar una etapa es reconocer que te encuentras en esa etapa.
Si tu novio te ha dejado por una amiga tuya, ha decidido casarse, vivir en el campo y tener muchos hijos y tú te empeñas en decir que lo llevas bien, es difícil que realmente lo llegues a llevar bien.
Sin embargo, si admites que lo llevas fatal, que les deseas el mal infinito en su nueva vida, que sus hijos sean muy feos y que nazcan con sobrepeso y que la alergia conquiste sus bucólicos días en esa fastuosa casa con piscina, es posible que te encuentres mucho más cerca de la superación. Luego las cosas se ponen en su sitio, dejas de odiarlos e incluso puedes pasarte a tomar un cafe y a conocer a sus simpáticos niños con sobrepeso. Por esta misma regla, es imposible dejar de ser un idiota si uno no asume primero que es un idiota. ¿Cuál es el problema de esto? Nadie cree que sea un idiota. Más bien creemos que los idiotas son los demás y que nosotros somos muy listos y que si seguimos aprendiendo cosas es para ser más listos, no para dejar de ser idiotas. ¿De verdad pensamos que si muriéramos ahora mismo esto es lo máximo que podíamos haber hecho con nuestras vidas, nuestros cuerpos, nuestras mentes, nuestro (inserte aquí su opción trascendente en caso de tenerla)? Teniendo tantas herramientas a nuestro alcance, ¿no deberíamos ir un poco más allá en conocimiento, libertad y felicidad?
¿Estamos viviendo al límite de nuestras posibilidades? Me temo que no. ¿Y eso no implica cierto estado de idiotez? Ser idiota no es grave, siempre y cuando se trate de algo transitorio. Pero sólo puede ser transitorio si uno sabe que es idiota, si no sabemos que somos idiotas seguiremos siendo siempre idiotas y entonces no será transitorio, será definitivo. Y lo malo de llegar a la muerte siendo un idiota es que probablemente en ese estado de consciencia en el que uno está más allí que aquí, nos demos cuenta de golpe de lo idiotas que hemos sido. No sé si pueden cambiar las cosas en el más allá pero, por si acaso, yo empezaría a cambiarlas mientras estemos por aquí.
B.A